El gato negro

Me gusta viajar y me gusta este sitio. Me siento cómodo en sus luces discretas, el tono cálido del ambiente, el silencio agradable que acompaña la suave bossa nova que se escucha en todo el escenario.

También me gusta El Gato Negro. Pero esta vez, no me refiero al relato de Edgar Allan Poe sino a una deliciosa mezcla preparada con un espresso doble, chocolate en polvo, crema batida y canela. Es una de las especialidades de la casa; una mezcla que envuelve los sentidos.

Me gusta venir a Cafebrería. Tomar su café y buscar entre sus libros usados algo nuevo para leer. Café y libros, ¿qué más se puede pedir? Nuevas letras, nuevos aromas. Comprar libros, platicar con los amigos especiales o simplemente, encontrar un espacio donde poner en orden los pensamientos.

Pero debo reconocer que existe otra razón de explorar Cafebrería. Hace un par de meses atrás tomé el Taller para Barista Básico gracias a una gentil invitación del Instituto Hondureño del Café. Este taller me permitió aprender (y degustar) los fundamentos de la preparación de un buen café. Una iniciación al refinado mundo del grano rojo que mueve al mundo. De nuestro grano rojo.

Así que tras el taller, decidí comenzar una exploración personal en busca de los sitios donde saborear los mejores cafés especiales cultivados en Honduras.

Hoy estoy en Cafebrería, en el Centro Comercial Novacentro, en Tegucigalpa. Una perfecta combinación entre librería y cafetería. Mientras tomo el último bocado de un cheesecake de maracuya (una maravilla culinaria traída sin lugar a dudas del Edén)  y hojeo la última novela de Isabel Allende, me pregunto donde me llevará este viaje. Todavía no lo sé, pero estoy feliz.

Descubrí que en Cafebrería utilizan Café Passion; un blend, una mezcla de cafés especiales de Marcala y que es distribuido por la compañía Servicios y Suministros, parte de la Exportadora Boncafé ubicada en San Pedro Sula. Servicios y Suministros se dedica también a la distribución de refinadas máquinas espresso y otros aditamentos a la industria del café (por si les interesa).

De acuerdo al perfil de taza elaborado por el Instituto Hondureño del Café, los cafés provenientes de la Región de Montecillos, en donde se encuentra Marcala y sus alrededores, son "uniformes con una fragancia a fruta y dulce. Tienen una acidez viva y brillante con un sabor a naranja y melocotón, lo cual crea una bebida vibrante. Poseen un post gusto entonante y un cuerpo aterciopelado".

Ya de por sí,el hecho de que sean cafés especiales determina en buena medida su calidad y sabor. Pero yo creo que es el tueste especial que le da al grano la exportadora sampedrana, lo que magnifica sus características. Realmente el post gusto se eleva y queda uno con la sensación agradable de haber tomado un buen café.

Me gusta Café Passion. De hecho, es el que yo normalmente tomo en mi casa cuando no he viajado a Marcala, Copán u Ocotepeque y he traído algún café con denominación de origen. Y entre otras razones, me gusta también por su empaque que es realmente como debe de ser un empaque de café. Pero de eso hablaremos otro día.

Los dejo ya. Mi café e Isabel Allende me esperan.

Que La Fuerza nos acompañe...siempre.

Posdata. Pregunten por las especialidades de la casa: "El Principito", "la Divina Comedia", "El Extranjero"....

                          "Lolita": un martini de café helado, chocolate y licor de frambuesa.

                                             Una buena manera de descubrir el verbo.

                                         Comics por todos lados. ¡Hasta en los sillones!.

                                     Bocado de cardenales: "Cheesecake de maracuya"

                                                Un mezzanine que invita a la lectura                            

                                                   Nuevas dimensiones del café hondureño