Regresó la Flaca...

-Compa…ya no lo veo tan afligido, tan morado. Como que ya aprendió a respirar… ¿va?
-Brother -me contestó Tom -¿qué le puedo decir? A todo se acostumbra uno. Y además, si no se alinea…
- ¡Jé!…lo alínean.
- Afirma…por cierto, déjeme contarle algo que no me va a creer.
- Ajá…
- Ayer, después de que dejé a Flory, me subí al taxi y qué cree…
- ¿Qué?
- Compa…en el taxi venía aquella flaca de la vez pasada, pero esta vez con Soledad.
-¿La Cocos nucífera?... pero ¿cuál Soledad?
- Sola, brother, sola. Venía sin el novio la chava.
- Ahhh… ¿Y?
- Compa…no me lo va a creer, pero desde que me vio, me sonrió.
- No hombre.
- Si compa…y viera que amable resultó. Comenzó a sacarme plática... Me preguntó qué de dónde era, qué hacía, cómo había llegado a este país. ¡Bien platicadora la muchacha!
- Ajá…¿Y usté qué le dijo?
- No, pues la verdad. Que yo había trabajado mucho en mi país para crear unas empresas, pero que después de algunos años, me había aburrido tanto de hacer lo mismo, que decidí pasar unas vacaciones en este país donde todo es al revés. Aquí cada día es diferente. Y cómo me gustó mucho, dejé a mi socio a cargo de las empresas y que ahora vivía de las rentas.
- ¡Puts! …¿Le dijo todo eso?... ¿Le vale a usté la vida, va?
- Pues es la verdad. Y viera compa que entonces empezó a platicar de ella. Me contó que había tenido un solo novio en tooooda su vida, pero que ya no andaban porque él la había traicionado con su mejor amiga… (casi llora, fíjese brother); que trabajaba todo el día, pero que no le ajustaba el sueldo para pagar las escuelas de los hermanitos (también, casi llora)…en fin, mil cosas. Y cada vez que me hablaba, se tocaba el pelo…para adelante, para atrás, para un lado, para el otro…simpática ella.
- Ummmm…
-Y miré que en verdad es buena persona. Resultó que yo me bajaba primero y cuando quise pagar, solo traía un billete de 500. Por supuesto, el taxista puso cara de jate y no me lo quiso cambiar. Entonces ella dijo que lo iba pagar por mí y que un día de estos se lo devolviera. Mire usted que buena onda de chava.
- Ummmm…
- En verdad, no pensé que fuera así. Yo creía que ella era como…loca, atrevida, pero no. Y fíjese compa que en una de esas, antes de bajarme, el taxi dio una vuelta tipo curva salvaje allá por La Leona, y si no es que ella se agarra de mis piernas, se hubiera puesto un macanazo de miedo.
En ese momento, mis antenitas de vinil detectaron la presencia del enemigo. Esto no me gusta – pensé – porque conociendo al alero, yo sé que puede haber peligro. Y es que el hombre tiene una facilidad para dejarse atrapar…bueno, si cuando llegaron los Smartphones a Honduras, ya el alero tenía desde hacía años la capacidad de activarse con solo un “Touch”...
-Viera usté como nos reímos compa. Ese taxista casi nos mata. Y cada vez que se ría, más movía el pelo esa muchacha…y olía como a fragancia, fíjese...
¡Púchica! Realmente que me perdone Dios por ser tan mal pensado, pero esa flaca no me la hace. Esa agarrada de pierna no es de una cipota criada en colegio de señoritas. Para nada. Que El Chavo de Arriba me agarré confesado, pero yo creo que ese olorcito corresponde a una mamífero carnívora, cánido, de cabeza ancha, hocico puntiagudo, pelaje largo, espeso, suave, cola larga y que persigue con astucia a la caza menor e incluso a las aves de corral.
O sea, yo creo que esa flaca huele a Zorra.
- Y fíjese compa -continuó contándome Tom -que ya más en la noche, ¿qué cree? Abrí el Facebook de por casualidad (usted sabe que esa papada a mí no me gusta) y cuál es mi sorpresa que he encontrado una solicitud de amistad de ella. ¡Buena onda esa chava! Lo que no entiendo es cómo me encontró…
¡Ah, no! –confirmé para mis adentros – Esa maje no es que huela a…¡Esa maje es Zorra! Ya estokeó al alero, medio chelón y con acento extranjero, y ya sabe que se carga los Bee Gees…( o sea, los billetes).
- Compa...¿verdad que no le aceptó la solicitud?
- Pues sí. Tengo que pagarle el dinero del taxi.
-Brother, esa honradez suya le va a costar caro. Mejor, como dice el amigo Gañote: “Absténgase Frijol, hombre, absténgase”.
-Brother…don preocup, don sofoc…solo le pago a esa chava y ya. Tranqui, no se alborote…y mejor me voy porque tengo cosas qué hacer.
Me quedé sorprendido. Primera vez que el alero me deja con la palabra en la boca.
Esto no me gusta. ¿Vuelvo a platicar con el brother?... ¿Le digo algo a Flory?... ¿Estokeo yo a esa Flaca basura?... ¿Qué hago?
¡Sánamabara! Cuánta razón tenía el gran Filósofo de Güemes cuando decía: “Agua que no has de beber…es charco.”
Pucha...Que La Fuerza acompañe al alero.

Comentarios

Entradas populares