Fotografía 101...Un (notable y desconocido) constructor artístico de Honduras

                                                                 Nelson Salgado. Arturo Sosa 2009

"...de la misma manera que su compañero y amigo, Nelson Salgado busca ser el vocero de una toma de conciencia social que lo ha llevado a la formulación de trabajos al aire libre, como el mural con que ha decorado una de las paredes que circundan el Parque La Leona. Trabajo que afronta el natural riesgo de que desaparezca, cuando la colectividad decida que es mejor un muro blanco que uno que expresa ese deseo indefinido de participación artística como instrumento de la colectividad social...."

Leticia de Oyuela
"Constructores artísticos entre siglos"
Grupo OPSA
2010

Así definió la historiadora al pintor Nelson Salgado.

Si Usted vive en Tegucigalpa es seguro que ha visto sus murales en La Leona. O es muy probable que alguna vez se haya topado con él, o mejor dicho, chocado con él, mientras pinta en el suelo de La Peatonal, en el Centro Histórico.

Nelson camina lento, irregularmente; habla en voz alta y muchas veces lo encontrará sentado, solo, manchado de pintura, en alguna de las bancas de piedra en La Peatonal capitalina,  mientras toma un respiro de su quehacer en el suelo, pintando este o aquel retrato religioso.

Hace muchos años, Nelson Salgado era una de las figuras emergentes más importantes del panorama artístico de la Escuela de Bellas Artes. Su obra, monumental casi toda, se apreciaba en sus murales de La Leona. Era una de las promesas más firmes de Honduras.

Pero el pintor tenía una manía artística, propia de la época, que se volvió en su contra. Como muchos otros pintores, Salgado gustaba de humedecer su pincel con la boca mientras pintaba. Eran los años ochenta y nadie sabía nada en Honduras sobre el plomo que contenían las pinturas.

Salgado cayó enfermo envenenado con plomo.  Casi se muere.

Durante los siguientes años, el joven artista permaneció en cama, totalmente alejado del mundo y de la realidad. Incapacitado de moverse, de hablar, de pintar. Cerca de ser un vegetal.

Pero el Destino es grande (o La Fe en El Poderoso o la Fuerza interna que todos tenemos dentro) y Nelson logró levantarse y volver a pintar. Rehabilitarse.

Ahora, vive para pintar en la calle. Vive de lo que sus amigos le dan. Vive para ser lo que tenía que ser: pintor.

Si Usted no lo conoce es un hecho que en  este Viernes Santo se maraville con su obra, en alguna de las alfombras de aserrín durante la Santa Procesión. La podrá reconocer por el tamaño y la calidad de su trazo. El trabajo destaca y es parte fundamental del evento.

Si vive en Tegus o anda de paseo, es bueno que conozca al artista. Que identifique a un notable y casi desconocido constructor artístico de este país. Que sepa algo más de esta tradición.

Creo que la Fe con argumentos es mejor para el alma.

Había guardado este texto para el día de hoy, porque es un buen día para descubrir el trabajo de Salgado. Sigo pensando que la fotografía documental es una ventana mágica para explorar otros mundos. De hecho, nuestros propios mundos cercanos. Y crecer como personas, como seres humanos.

Como creció Nelson Salgado.


                                                               Nelson Salgado. Arturo Sosa. 2009




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