Aviso de desaparición

Por este medio, el suscrito avisa a las autoridades civiles, militares, tropas 1 a la 273 de los Boy Scouts, al Capitán América y al público en general, de la desaparición del ciudadano extranjero que responde al nombre de Tom (a secas).

El susodicho fue visto por última vez la noche de ayer en la casa de habitación del suscrito ubicada en las montañas de Santa Lucía. Traía la mirada perdida y llorosa (el susodicho); actitud cabizbaja, meditabunda y preocupapensante. El suscrito pensó que tanta frikeason en el susodicho era producto de haberse echado el regreso vía Trans 450 en viernes de pago de quincena, con lluvia y con Marcha de Indignados. Pero no (que conste que sí era viernes, sí era quincena y sí llovió. Pero de lo último...).

Según propias palabras del susodicho (aunque en realidad apenas balbuceaba), tal decaimiento provenía de un duro palo de guayaba que le dio la señorita Flory muy pocas horas antes. Un macanazo inesperado.

De acuerdo a la versión extraída al alero, entre lagrimas de cocodrilo y pucheros, la señorita Flory fue forzada a realizar semejante acto de barbarie y sin anestesia, presionada por su señora madre quien responde al alias de La Suéter y/o la Vieja nociva. Se desconocen todavía las razones de este asesinato cargado de crueldad innecesaria...porque al hombre, lo mató. De plano.

Para mayor desgracia, cerca de las diez de la noche, el susodicho recibió una llamada a su celular de una fémina que no trabaja el oficio, pero si regala el beneficio, y que responde al mote de Cocos nucífera.

A pesar de  los ruegos del suscrito, el alero salió de la casa poco después, cerrando el portón de enfrente como alma que se lo lleva el diablo. O que va donde el diablo. O donde la diabla, mejor dicho.

Se teme lo pior. Todo.

Si anda Usted en bus, taxi colectivo o pajareando en algún Mall, sepa que el susodicho viste jeans viejos y camiseta de La "H". Es medio chele, un poco alto, acento extranjero y ojos azules románticos. ¡Ah! Y calza grande.

O si por esas casualidades de la vida, el amable lector pasa enfrente de una cantina y escucha la inconfundible voz del cantautor mexicano don José Alfredo Jimenez echándose  "La media vuelta", "No me amenaces" o "Te solté la rienda", por favor notifique inmediatamente al suscrito. Es muy posible que el alero se encuentre ahí adentro, en estado calamitoso, ingiriendo bebidas espirituosas.

Por otro lado, si se encuentra a una flaca alta, charraluda, con ropas mamadas como embutido y mostrando más allá de lo que las monjitas del María Auxiliadora o el Sagrado Corazón recomendaban, por favor llame al Batallón 316 o algún angelito de la 18 para hacerles un encarguito con la zorra esa. O si le es más fácil, llame a los muchachos de la DEA apostados en el aeropuerto de Miami. Está comprobado que ellos sí saben capturar gente in fraganti... y que no devuelven a nadie (aunque pujen).

Por mientras se reciben noticias esperanzadoras, se ruega mantener la calma y evitar la ansiedad. Si siente mucho dolor, por favor que le den Vitaflenaco.

Como todos sabemos, el alero es ampliamente conocido por tener más vidas que un zopilote apedreado. Don preocup, don sofoc....ahí va  a aparecer, reventado, pero vivo.

Así lo espera la patria.

Esta fue la primera llamada.

El Suscrito.




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