Lujuria

                                                            "Lujuria"...por Arturo Sosa 2014.


Comenzaron a preguntarme muchas cosas.

- "¿Cuántos chiles utiliza?... ¿Usa más chile cabro que jalapeño?"- me dijeron.

- "¿Hierve las frutas? " - indagaron otros.

-  "¿Podría ponerle más chile?...¿Más fruta?  ¿Más espesa? " - pidieron algunos.

Más, más. Siempre más. ¡Ah! la naturaleza del ser humano.

Así que reuní muchas frutas distintas y les añadí la mayoría de los chiles que encuentro en Honduras. Y las sume.

Cuando la probé, me acordé de Eva. La Eva de Gioconda Belli:

"...Eva se apresuró. Sus manos sudaban. le parecía que el aire apenas alcanzaba a llenar su pecho. Extendió la mano. Su palma derecha tocó la áspera piel vegetal del árbol. Abrió los dedos. Oyó el retumbo de su cuerpo que palpitaba entero queriendo salirse de su envoltorio. Cerro los ojos. Entreabrió los párpados. Seguía de pie en el mismo lugar. Estaba viva. nada había cambiado. No moriría, pensó. Envalentonada, se acercó a la rama más baja, tomo el fruto oscuro, suave al tacto. lo llevó a su boca y lo mordió. La dulzura del higo se entendió por su lengua, la carne blanca derramó miel entre sus dientes. ....el jugo penetrante del fruto prohibido. El placer de sus papilas se expandió como un eco por todo su cuerpo...".

Les presento mi nueva salsa. Y si la primera era Prohibida, esta es Lujuria. Un pecado capital.

Más picante, Y más dulce. Mucho más. Y cuando la prueben, el mundo estallará en luces nuevas y distintas.

Mañana comenzaré a repartirla. A compartirla. Y como todo lo extraordinario en la vida, pocos serán los escogidos.